Nueva York. El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, fue galardonado este lunes por la Fundación Bill y Melinda Gates en reconocimiento a sus políticas para combatir el hambre y la pobreza en Brasil, en el marco de la iniciativa Goalkeepers. Lula destacó durante la ceremonia que su empeño en erradicar el hambre proviene de sus propios orígenes humildes en el noreste de Brasil, una región marcada por la pobreza.
“Mi obsesión por combatir el hambre en el mundo viene precisamente de mi origen”, afirmó Lula, recordando su infancia en una familia de ocho hijos que se vio forzada a emigrar en busca de mejores oportunidades. En su discurso, calificó de “inadmisible” que en pleno siglo XXI, con los avances tecnológicos actuales, aún haya niños que se vayan a la cama sin haber cenado, y que se despierten sin alimento para desayunar.
El presidente brasileño hizo hincapié en que eliminar el hambre es una “responsabilidad” de los gobernantes, subrayando que los esfuerzos globales deben enfocarse en este problema urgente. Según datos del Banco Mundial, en 2022 más de 712 millones de personas vivían en pobreza extrema, un aumento de 23 millones desde 2019.
El filántropo y cofundador de Microsoft, Bill Gates, destacó la importancia del trabajo de Lula, afirmando que sus políticas muestran cómo “programas concretos pueden generar avances increíbles para que cada niño pueda crecer y avanzar”.
Durante sus dos primeros mandatos presidenciales, Lula lanzó el programa Bolsa Familia, al que calificó como “el programa más exitoso” para combatir el hambre a nivel mundial. En 2014, aseguró que Brasil había erradicado el hambre, pero al regresar a la presidencia en 2023, se encontró con que 33 millones de personas sufrían de inseguridad alimentaria en el país. Hasta ahora, ha logrado reducir esa cifra a 24.5 millones y espera eliminar el hambre en Brasil para 2026, cuando finalice su segundo mandato.
Lula también adelantó que, durante la presidencia de Brasil en el G20, planea lanzar la Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza en noviembre, en un esfuerzo por ampliar la lucha contra este problema a nivel internacional.