Desde la Casa Blanca, el presidente estadounidense Donald Trump lanzó un mensaje contundente a las empresas globales durante su participación virtual en el Foro de Davos este jueves 23 de enero: “Fabriquen en Estados Unidos o paguen aranceles”. El mandatario, quien se excusó por no asistir presencialmente debido a su reciente toma de posesión, prometió impuestos “más bajos del mundo” a quienes trasladen su producción al país.
“Si no fabrican en EE.UU., tendrán que pagar aranceles, de montos variables”, advirtió Trump, enfatizando que su administración busca atraer inversiones y fortalecer la economía nacional. Además, aseguró que estos aranceles generarían “cientos de miles de millones, incluso billones de dólares” para el Tesoro estadounidense, recursos que ayudarían a reducir la deuda pública.
“No habrá un mejor lugar en el mundo para crear empleos, construir fábricas o hacer crecer una empresa que aquí, en Estados Unidos”, afirmó el presidente, reforzando su visión de un país como epicentro de la industria global. Con este discurso, Trump reafirmó su política económica proteccionista, marcada por incentivos fiscales y medidas arancelarias.