En un acto de cercanía con la ciudadanía, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo recorrió las colonias afectadas por las inundaciones ocurridas el pasado mes de marzo en Reynosa, Tamaulipas, acompañada por el gobernador Américo Villareal Anaya. Las lluvias torrenciales que azotaron la región dejaron un saldo trágico: tres personas fallecidas, 87 colonias completamente inundadas y más de 100 comercios con pérdidas totales, según cifras oficiales. Durante su visita, la mandataria escuchó atentamente los testimonios de familias que perdieron su patrimonio y anunció medidas concretas para apoyar su recuperación.
Sheinbaum destacó que las familias recibirán un paquete de enseres esenciales entregados por la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), incluyendo refrigeradores, estufas, colchones, vajillas y ventiladores. “Estos cinco enseres serán entregados de manera gratuita para ayudar a las familias a restablecer sus hogares”, afirmó ante los vecinos reunidos. Además, anunció un apoyo económico de 8 mil pesos por vivienda censada, destinado a cubrir labores de limpieza tras las inundaciones. Este recurso, conocido como “apoyo de limpieza”, busca facilitar la eliminación de lodo y residuos acumulados durante la emergencia.
La presidenta explicó que solo las familias registradas en el censo recibirán estos beneficios, pero en caso de no estar inscritas, brigadistas visitarán sus domicilios para asegurar que nadie quede excluido. En paralelo, las autoridades continúan trabajando en la revisión y rehabilitación de la infraestructura de drenaje para evitar futuras tragedias. Este compromiso fue respaldado por el gobernador Villareal, quien señaló que las acciones continuarán hasta garantizar la reparación total de los daños.
Durante la emergencia, la Secretaría de la Defensa Nacional activó el Plan D-NIII-E en varios municipios, rescatando a decenas de personas atrapadas en sus hogares debido a la acumulación de agua. La Secretaría de Bienestar Social también distribuyó 5 mil paquetes alimenticios entre las familias afectadas, además de organizar brigadas de limpieza y recolección de residuos. Más de 100 personas fueron refugiadas temporalmente gracias a la intervención oportuna de las autoridades.
El recorrido de Sheinbaum y Villareal no solo evidenció la magnitud del desastre, sino también el compromiso de las instituciones por brindar soluciones integrales. Mientras los habitantes expresaban sus preocupaciones y esperanzas, quedó claro que la reconstrucción será un proceso largo, pero con el respaldo federal y local, las familias afectadas tienen una luz al final del túnel. Esta visita marca un hito en la coordinación interinstitucional para enfrentar desastres naturales y reconstruir comunidades vulnerables.