En el histórico Washington Crossing, donde el general George Washington dirigió a sus tropas a través del río Delaware en un momento crucial de la Guerra de Independencia, la candidata presidencial demócrata Kamala Harris volvió a Pensilvania. Esta vez, su mensaje resonó no solo entre sus partidarios, sino también entre un grupo de republicanos descontentos con Donald Trump, creando una rareza en el paisaje político actual: un llamado bipartidista a priorizar el país sobre las lealtades partidistas.
El excongresista Adam Kinzinger, quien subió al escenario junto a Harris, dejó clara su postura: “Es hora de poner el país por encima del partido”. Con un tono directo, Kinzinger describió a Trump como un “hombre quejoso, débil y diminuto que está muerto de miedo”, palabras que resonaron en el aire helado de la mañana mientras más de 100 simpatizantes aplaudían en apoyo.
Harris, tomando la palabra, no escatimó en críticas hacia el expresidente. “Donald Trump es cada vez más inestable y desquiciado”, afirmó, instando a la audiencia a escuchar las voces de aquellos que alguna vez lo apoyaron y ahora han dado un paso al frente en su contra. Enfatizó la importancia de la advertencia de Mark Milley, exjefe del Estado Mayor Conjunto, quien catalogó a Trump como un “fascista” en conversaciones con el periodista Bob Woodward.
La vicepresidenta recordó que cualquier persona que “pise nuestros valores democráticos”, como ha hecho Trump, no debería estar detrás del sello presidencial. “Considera a cualquier estadounidense que no lo apoye como un enemigo”, añadió, enfatizando que el exmandatario ha amenazado con usar a las fuerzas armadas contra sus críticos.
Aunque Harris reconoció que el apoyo de republicanos en un evento demócrata podría parecer “sorprendente”, subrayó que las elecciones de este año son diferentes. “La Constitución no es una reliquia del pasado”, declaró. En un llamado a la acción, invitó a los votantes, independientemente de su afiliación política, a unirse a su campaña: “Si comparten esa opinión, hay un lugar para ustedes aquí”.
A medida que se acerca la fecha electoral, el mensaje de unidad y resistencia ante la polarización política resuena con fuerza, dejando entrever que en tiempos de crisis, los valores democráticos son un terreno común en el que todos pueden encontrar su voz.