Este lunes, Pete Hegseth, secretario de Defensa de EE. UU., realizó su primer viaje oficial a la frontera con México, con el objetivo de supervisar las operaciones de seguridad en la región. La visita se enmarca en los esfuerzos de la administración Trump por reforzar el control en la frontera sur, con un enfoque en la militarización de la inmigración.
En su cuenta de X, Hegseth subrayó que el presidente Trump busca un “100% de control operativo” sobre la frontera y afirmó que cumplirán con este objetivo. Durante su visita, el secretario inspeccionará las labores de la Fuerza de Tarea Conjunta Norte, con base en Fort Bliss, Texas, que ha estado apoyando las actividades de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU. en la región.
Hegseth tiene programado observar cómo las fuerzas militares apoyan las tareas de seguridad en la frontera, incluyendo la recepción, preparación y entrenamiento de las tropas que se despliegan en la misión.
Este viaje también forma parte de una tendencia creciente en la que la administración Trump recurre a los militares para enfrentar los desafíos relacionados con la inmigración. El mes pasado, el presidente desplegó 1.500 tropas adicionales y utilizó aviones militares para apoyar las deportaciones de inmigrantes detenidos en ciudades como El Paso y San Diego.