México e India: Una alianza que nace en las montañas de Kananaskis
Entre las majestuosas montañas de Kananaskis, Canadá, se escribió un nuevo capítulo en las relaciones entre México e India. La presidenta Claudia Sheinbaum y el primer ministro Narendra Modi sostuvieron un encuentro bilateral durante la cumbre del G7 que podría marcar el inicio de una era de cooperación estratégica entre ambas naciones.
El diálogo, celebrado en el marco de la participación de México como invitado especial al foro, giró en torno a cuatro ejes clave: comercio, farmacéuticos, tecnología y cooperación Sur-Sur. “Vemos un inmenso potencial para fortalecer nuestros lazos”, escribió Modi en su cuenta de X, destacando la importancia de sectores como semiconductores, minerales críticos y salud.
Para México, esta alianza representa una oportunidad de oro. India, con sus 1,400 millones de habitantes y una economía en pleno crecimiento, ofrece un mercado alternativo para diversificar el comercio exterior. El sector farmacéutico indú, líder en producción de genéricos, podría convertirse en un pilar para el sistema de salud mexicano.
Sheinbaum, por su parte, enfatizó en redes sociales el compromiso mutuo por una “alianza productiva”. Los acuerdos incluyen impulsar proyectos conjuntos en innovación digital y desarrollo científico, áreas donde India ha demostrado un avance extraordinario en los últimos años.
Este acercamiento no es casual. Ante un escenario global cambiante, tanto México como India buscan reducir su dependencia de los mercados tradicionales y fortalecer su posición en los organismos multilaterales. La cooperación Sur-Sur, con enfoque en desarrollo sostenible y combate a la pobreza, emerge como un terreno fértil para esta naciente alianza.